Un robo con fuerza más que sumar a los ocurridos en los últimos meses en el Casco de Granadilla de Abona, es el acaecido a una vecina en el interior de su vivienda cuando ella y un nieto menor de edad se hallaban durmiendo en sus respectivas habitaciones. Y van…
Los hechos ocurrieron de noche en el Casco Antiguo de la Villa Histórica, concretamente en la calle del Agua, en el entorno de la iglesia de San Antonio de Padua y la plaza de San Pedro, donde el autor o autores del robo sustrajeron varios efectos de valor que se pueden vender en el mercado ilícito, así como toda la comida que la afectada tenía en su despensa.
La ciudadana, una mujer de alrededor de 70 años y su nieto, un adolescente de 15 años, no se dieron cuenta del robo ya que ninguno escuchó ruido alguno que les despertara, apercibiéndose de lo que había ocurrido cuando por la mañana encontraron la puerta principal de su domicilio abierta, a través de la cual habían accedido los delincuentes sustrayéndoles un televisor de pantalla plana, dos microondas y un ordenador portátil, entre otras cosas.
Además, los ladrones se apropiaron de los productos alimenticios que la mujer había comprado pocos días antes y tenía en la despensa. Por las características de este nuevo delito contra el patrimonio que añadir a la ya larga lista de los acaecidos en el Casco, todo apunta a que los delincuentes entraron y salieron varias veces de la casa para transportar los efectos robados.
Cada vez son más los vecinos que reconocen tener miedo, ya que los delincuentes actúan tanto en casas deshabitadas como habitadas, y aunque ante las quejas de la ciudadanía el Ayuntamiento convocó una Junta Local de Seguridad que tuvo lugar el pasado 26 de enero, en la que la principal conclusión que se sacó fue que la Guardia Civil no ha detectado un incremento de la delincuencia en el Casco de Granadilla, lo cierto es que ésta no solo no se contiene, sino que va en aumento.
En este sentido, algunos vecinos han declarado que si es verdad que se han tomado medidas para frenar los robos, éstas no se han notado, así como que no ven el interés de las autoridades, la Guardia Civil y la Policía Local por frenar el fenómeno, denunciando que los delincuentes siguen actuando de forma impune.
Explican estos vecinos que muchos de los robos, algunos con violencia, registrados en los últimos meses y que han generado la alarma de la población se han llevado a cabo en las inmediaciones de la iglesia parroquial, así como en la calle Arquitecto Marrero Regalado y en la calle dell Pino. Además de estas casas particulares, los ladrones han actuado dos veces en el Casino, una en la iglesia parroquial y otra en el centro de la Tercera Edad.