Ya informamos sobre la reciente entrega de premios de la II edición del Concurso de Microrrelatos dirigido al alumnado de los cuatro Institutos de Enseñanza Secundaria (II.EE.SS.) del municipio, cuyos ganadores fueron Camila Correa (del IES Magallanes, 4º Curso) en la categoría correspondiente a Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), con el microrrelato titulado ‘El barco de los mareos’, y Alejandro C. Pérez (del IES Granadilla, Electricidad) en la categoría de Bachillerato, Grados Medios y Superior, con el relato titulado ‘Me lo ha dicho mi padre’. A ambos queremos darles la enhorabuena los que hacemos este periódico.
A continuación, para conocimiento y consideración de nuestr@s lectores-as reproducimos dichos relatos ganadores:
« “El barco de los mareos”
- ¡Nos hundimos!- Abrí los ojos desconcertado y alarmado a la vez. A mi lado encontré a todos mis compañeros de camarote durmiendo. Debían de ser como las dos de la madrugada, podría haber intentado volver a dormir, pero sabía que, como siempre, no lo conseguiría. Llevaba solo una semana en ese horrible barco y ya lo odiaba. Pesadilla de día y pesadilla de noche, solo la primera, despierto. Entonces decidí levantarme.
- ¿Otra vez una pesadilla?- dijo una voz a mi espalda, era Jeff, probablemente uno de los superiores que peor me caía.
- Sí, ¿algún problema?- contesté yo.
- Un marinero con miedo al mar, eres raro pero esto es pasarse, dijo Jeff más para fastidiarme que con intención de ayudarme.
Sí, es cierto, soy el marinero más raro del mundo, odio el pescado, temo al mar más que a cualquier otra cosa y encima me mareo en los barcos. Pero no toda la culpa es mía, yo no escogí la vida de un marinero, yo no, mi padre. Él quería tener un hijo capitán de barco. -¿Cómo iba yo, un chico delgaducho, bajito, que se descompone en los barcos y que teme al mar, llegar a ser capitán?-»
« “Me lo ha dicho mi padre”
Marcos y Arón tienen 8 años y están sentados en el parque de la plaza separados del resto de los niños.
Marcos tiene en la mano la rama que arrancó del arbusto, con ella golpea las flores de la jardinera y asusta al pequeño perrito cojo, hace burlas al anciano que arrastra los pies y se ríe señalando al loco que habla solo en la otra acera. De pronto se acerca a Arón.
- ¿Tú también te alejas de todos? Yo sí porque me lo ha dicho mi padre, Jasán es moro. Lesme es negro, Maikol tiene ademanes de hembra y las demás son niñas.
Arón sonriendo contesta.
- Yo solo estaba descansando, y vuelvo con ellos. Porque me lo ha dicho mi padre, que me aleje de las malas personas.
Marcos deja caer la rama que arrancó del arbusto, huele las flores de la jardinera, acaricia al pobre perrito cojo, saluda al anciano que arrastra los pies, mira con ternura al loco de la acera de enfrente y despacio se acerca al grupo.
Todos lo reciben con alegría. »