Con tan sólo 10 años de edad, la catalana Gisela Pulido se proclamó campeona del mundo del circuito profesional KPWT en noviembre de 2004 venciendo a rivales adultos. Desde ese año no ha parado de cosechar éxitos y campeonatos mundiales. Ha sido 10 veces campeona del mundo de kitesurf freestyle (2004, 2005, 2006, 2007, 2008, 2009, 2010, 2011, 2013 y 2015), medalla de oro Gravity Games (2005), campeona Wave Master (2005) y campeona de Europa Junior (2003).
El Desafío Movistar Gisela Pulido Islas Canarias tuvo lugar del 11 al 17 del pasado agosto, empezando desde el oeste, en La Graciosa, y terminando en la isla más occidental del archipiélago, El Hierro. Durante esos siete días, Gisela recorrió con su tabla y su cometa más de 380 kilómetros de travesía de isla en isla, un recorrido que nadie antes se había atrevido a navegar en kitesurf.
La campeona mundial dijo sobre este desafío: «El reto lo hago porque este año estoy descansando del Mundial, quería tomarme un año de parón y pensar un poco mi futuro como deportista, hacia dónde quiero orientar mi carrera y, de paso, oxigenar mi cuerpo y mi mente. En vez de enfrentarme a mis rivales quería enfrentarme a otros retos, a la naturaleza y a mí misma y ver hasta dónde llegan mis límites».
«Esto es algo que no he hecho nunca. Estoy acostumbrada a competir siete minutos, hacer una manga, parar, otros siete minutos, parar… Y esto no tiene nada que ver, esto es larga distancia donde hay que mantener el cuerpo en todo momento en buen estado porque son muchas horas y hay que intentar hacer un buen ritmo. Hay un compromiso entre ir muy rápido y cansarse mucho o ir más despacio y al final acabar agotada de lo largo que es, por eso hay que encontrar el equilibrio, ni ir muy lento ni muy rápido y es complicado».
Una vez completado los 380 kilómetros, Pulido pudo sacar las primeras conclusiones del desafío: «He aprendido que si uno quiere, puede; y si te pones un reto delante tienes que ir a por él y luchar el máximo. Lo más importante es rodearte de un buen equipo que te ayude. Ha sido una de las experiencias más bonitas de mi vida y he vivido muchas desde los ocho años que aprendí a practicar este deporte«.
El pasado 15 de agosto, en un artículo titulado ‘Gisela Pulido supera la etapa más difícil entre Agaete y El Médano’, laopinion.es decía:
« «Ha sido súper físico. Básicamente, se me ha hecho eterno, pero gracias al equipo y todos los ánimos nunca perdí la sonrisa». Difícil cuarta etapa del Desafío Movistar Gisela Pulido Islas Canarias. Han sido aproximadamente 82 km entre Agaete (Gran Canaria) y El Médano (Tenerife) que se complicaron por la falta de viento del tramo final, tanto que en múltiples ocasiones Gisela ha tenido que esperar a que hubiese viento sobre la tabla y con la cometa en el agua. Al final llegó a la orilla nadando, con el reconocimiento y aplauso de todo el público. Es la primera deportista, y mujer, que intenta recorrer los 380 km de isla a isla en kite, un esfuerzo físico y mental en el mejor escenario posible: las Islas Canarias.
La etapa entre Gran Canaria y Tenerife fue una de las más difíciles hasta el momento del Desafío Movistar Gisela Pulido Islas Canarias. La campeona mundial inició ayer en Agaete el cuarto tramo de su actual desafío, que calificó de «durísimo». Finalmente, llegaba a Tenerife exhausta, después de que la falta de viento en la última parte de la etapa le pusiese las cosas más complicadas que nunca.
La etapa comenzó bien en Agaete y continuó muy rápida. Una vez que Gisela alcanzó mar abierto el viento empezó a soplar fuerte, controlando rumbo y velocidad con 23 nudos.»Hicimos 40 km en una horae incluso estaba un poca relajada, en el sentido de que pensaba que lo tenía hecho», aseguró.
Durante el trayecto cambió de cometa varias veces «porque salí con la 12 metros de Agaete y después, en medio del mar, como subió y subió el viento no pude aguantarla más y cambiamos a la 9 metros; una odisea porque fue muy complicado».
Pero al llegar a la isla de Tenerife cambió el panorama, a la inversa: el viento comenzó a bajar cada vez más en intensidad hasta que llegó un momento en que se paró por completo. Gisela tenía que bajar la cometa para cambiarla a una más grande «y ni siquiera la más grande era suficiente; no se podía relanzar la cometa desde el agua, no había viento. Conseguí llegar a la playa con la 15 metros, que es la cometa más grande y la tabla de race, que es la tabla con más volumen que tenemos».
Tras haber salido a las 10:45 hora canaria de Agaete, hacia las 16:00 horas, Gisela aparecía en una concurrida Playa de El Médano, a la que llegó nadando ante la falta de viento.
A pie de playa, el público reconocía su esfuerzo con un gran aplauso, encabezado por Cristóbal de la Rosa, viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias; María Méndez, gerente en Promotur Turismo Canarias; y Nacho Mendoza, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Granadilla de Abona, que no quisieron dejar de apoyar a Gisela en este reto por las Islas Canarias... »