La Planta de Regasificación de Gas Natural Licuado que se pretende llevar a cabo por la empresa Enagás en el Polígono Industrial de Granadilla de Abona ha venido siendo objeto de numerosas opiniones enfrentadas entre favorecedores y detractores de dicha infraestructura. Así, tras la paralización del proyecto por parte del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) el pasado 31 de marzo de 2015 por carecer del preceptivo estudio de impacto ambiental sobre cómo afectaría la Planta al resto de instalaciones ubicadas en el Polígono Industrial (lo cual significó una batalla ganada por los colectivos que mantenían una postura contraria a su construcción que les permitió ganar tiempo en su lucha), dio lugar a que Enagás tuviera que redactar y presentar un nuevo proyecto modificado que incluyera el Estudio de Impacto Medioambiental.
Presentado el nuevo proyecto por Enagás, las organizaciones políticas (Podemos, IUC y Sí se Puede) y colectivos (Plataforma contra el Puerto de Granadilla y Ben Magec )contrarios a la construcción de la Planta presentaron el pasado verano alegaciones denunciando que este proyecto condena el desarrollo de las energías renovables en las Islas, que carece de utilidad pública y que obedece a intereses de las eléctricas y particulares, calificando el Estudio de Impacto Ambiental que acompañó Enagás de desastroso y sesgado, pues sólo pretende favorecer la introducción del gas sin tener en cuenta los verdaderos peligros que su instalación supone.
Ya el Alcalde, partidario de la realización de la obra, se pronunció en el sentido de lamentar el retraso de la construcción de la Planta una vez el Tribunal Superior de Justicia de Madrid paralizara su autorización, aunque le pareció coherente que tenga que exigirse al proyecto la presentación del informe de impacto medioambiental. Así, una nota de la Agencia EFE publicada el 1 de abril con el título ‘El alcalde de Granadilla ve «sensato» realizar un estudio medioambiental global de la planta de gas‘, decía al respecto:
« El alcalde de Granadilla, Jaime González Cejas, ha dicho que le parece «sensato» que se deba realizar un estudio «medioambiental global» ante los posibles impactos de una futura planta de gas licuado cuya autorización ha sido paralizada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
Esa planta regasificadora se prevé construir en el Polígono Industrial de Granadilla, anexa al Puerto Industrial en construcción y a la actual central térmica que genera electricidad para gran parte de Tenerife.
Según una sentencia del TSJM, la regasificadora no cuenta con un análisis de los riesgos medioambientales que implica desarrollar este proyecto junto a las «actividades potencialmente peligrosas de la zona». El alcalde explico que «analizada la situación por nuestros técnicos» sobre dicho dictamen, «deduce que el TSJM considera que el aspecto debe complementarse con un impacto global no solo de la planta de gas sino de la central térmica», afirmó.
Pese a este asunto, Cejas considera que «no es una buena noticia que esta planta se retrase ocho meses o un año más».
A su juicio, el gas «es absolutamente compatible con las energías alternativas» y «supondría un ahorro para los ciudadanos en el recibo de la luz».
El dirigente socialista afirma que tiene «esperanza» de que una vez se subsane «ese requerimiento administrativo o medioambiental» la obra pueda comenzar.
Sobre el Puerto de Granadilla, necesario para descargar el gas licuado, ha dicho el alcalde que las obras van a buen ritmo y espera que esté finalizado en 2016.
«Hablamos de empleo y actividad económica en este Puerto, además de la instalación de una regasificadora compatible con las energías limpias y en el cumplimiento del protocolo de Kioto», subrayó el alcalde.
Según el TSJM, no consta que la declaración de impacto ambiental contenga un análisis independiente de los efectos y riesgos de esta regasificadora en una zona donde existe a pocos metros una central térmica.
El dictamen se deriva de un recurso presentado por la Plataforma Ciudadana contra el Puerto Industrial de Granadilla en contra de las resoluciones del Gobierno Central que permitían las construcción de la planta. »
Ya el asunto traía cola a partir de la paralización de la autorización por del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, con unas declaraciones del abogado de la Plataforma Ciudadana contra el Puerto de Granadilla, Isidro López, que se pronunció en sentido contrario congratulándose por esa decisión que permitiría ganar tiempo y retrasaría al menos un año la construcción de la Planta, tal como publicó la Agencia Europa Press el 31 de marzo en una nota titulada ‘La Justicia paraliza la construcción de la regasificadora de Granadilla’, que decía:
« El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha paralizado la construcción de la regasificadora de Granadilla (Tenerife) al anular la declaración de impacto medioambiental y la autorización administrativa.
En una sentencia hecha pública este martes por la Plataforma Ciudadana Contra el Puerto de Granadilla, el tribunal incide en la ausencia de un estudio de impacto ambiental de la afección que generarían todas las instalaciones ubicadas en el polígono industrial, como la central térmica, la planta de gas o los almacenes.
Este fallo, que estima el recurso contencioso-administrativo interpuesto por la Plataforma pero no es firme, admite recurso que se presentaría ante el Tribunal Supremo (TS), pero para la Plataforma, a expensas de que se pueda solicitar suspensión cautelar, el proyecto queda atascado durante un año como mínimo y deberá empezar «prácticamente de cero» si el TS lo ratifica.
El abogado encargado del caso, Isidro López, ha señalado que la sentencia coloca el caso en una situación procesal «distinta» ya que ahora, la otra parte -Enagás- tiene que «demostrar que tiene la razón».
El argumento del juzgado, ha señalado, es que la afección al medio ambiente funciona como un «efecto dominó» ya que «la suma» de todos los impactos de las distintas instalaciones de la zona «es bastante superior» a la de una sola instalación (en este caso la Planta de Gas), por lo que solicita un estudio «acumulativo».
Pese a todo, López ha lamentado la relación «asimétrica» que se mantiene entre demandante y demandado, ya que en este caso concreto, no se han estimado muchas de las alegaciones recogidas en la demanda al no poder aportar estudios alternativos.
«Es una situación injusta que se produce en todo el planeta. Los vecinos y las ONG no podemos luchar contra el poder de las administraciones y el Estado. Multinacionales y políticos imponen su ley», ha comentado.
En esa línea, ha criticado que «la economía se pone por encima de las personas», y ha incidido en que las posibilidades de las energías renovables son «inmensas», pero hace falta «voluntad política» para «cambiar» el modelo energético.
Las renovables generan empleo cualificado
Isidro López ha minimizado la anunciada posible creación de 1.500 puestos de trabajo a partir de la instalación de la Planta de Gas ya que «está todo automatizado» y, frente a ello, ha señalado que las renovables aportan generación de empleo «cualificado», permitirán a las islas acceder a la «soberanía energética» y reducir la dependencia del petróleo, así como abaratar la factura eléctrica.
Desde la Plataforma Ciudadana han insistido en que la sentencia es un «gran paso» para empezar a abordar el «imprescindible» cambio de modelo energético ya que el gas también es «contaminante». En su opinión, es una «victoria» del movimiento ecologista que, además, justifica «todavía menos» la construcción del puerto industrial. »
También se mostraba partidario de la construcción de la Planta de Gas el actual presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, que cuando aún era candidato y a raíz de la sentencia del TSJM se lamentó del retraso que eso significaría para la instalación de la regasificadora. Así lo expresa una nota de la Agencia Europa Press publicada el 1 de abril, que con el titulo ‘Clavijo apoya el gas como «transición» hasta la generalización de las renovables‘, decía:
« El candidato de Coalición Canaria (CC) a la Presidencia del Gobierno, Fernando Clavijo, ha apoyado este miércoles la introducción del gas en Canarias como «elemento de transición» hasta que se generalicen las energías renovables.
En una rueda de prensa en la que ha presentado los ejes económicos de su programa electoral, ha dicho que el gas es un «paso intermedio» hasta que la tecnología permita hacer «sostenible» la implantación de las renovables y, además, es «menos contaminante» y permite ahorrar «mucho dinero».
En su opinión, se pasará de una situación de depender del petróleo «a otra mejor, más barata y respetuosa con el medio ambiente», al tiempo que también ha alertado de que los esfuerzos por las renovables pueden ser infructuosos si el Estado «mete un cerrojazo».
Sobre la regasificadora de Arinaga, ha dicho que su instalación no depende solo del Gobierno de Canarias, sino también del Cabildo y el Ayuntamiento de Agüimes, y en cuanto a la de Granadilla -paralizada por el TSJM- ha lamentado que se «retrasa» la llegada de esa transición energética y, por tanto, impide su «avance». »
(Continuará…)