Mediante un Convenio de colaboración entre Canarias y el Estado en materia de aguas, cuya inversión total asciende a 41 millones de euros, en Granadilla de Abona y Guía de Isora se están construyendo sendas desaladoras que iniciarán próximamente la fase de pruebas según lo anunció el director de Aguas del Gobierno de Canarias, Juan Ramón Martínez, durante una visita realizada a estas dos infraestructuras hidráulicas acompañado por el consejero de Aguas del Cabildo de Tenerife, el alcalde de Guía de Isora y el concejal de Urbanismo, Obras y Servicios Municipales de Granadilla de Abona, que recorrieron las instalaciones para conocer el resultado final de las obras, cuyos ensayos para evaluar su funcionamiento se prolongarán a lo largo del primer semestre del año.
Juan Ramón Martínez indicó que la puesta en marcha de las instalaciones, cuyas obras están siendo ejecutadas por el Gobierno de Canarias con financiación estatal y de la Unión Europea a través de fondos FEDER, aumentará notablemente la disponibilidad de agua para el consumo doméstico, permitiendo así cubrir la demanda de las zonas turísticas del sur de la Isla y ayudando a regular el precio de mercado del agua.
Por su parte, El consejero de Aguas del Cabildo de Tenerife, Manuel Martínez, destacó la colaboración entre el Gobierno Autónomo y el Cabildo cuyo fin primordial es mejorar el abastecimiento de agua en la Isla y recordó que, por parte de la Corporación Insular, se tiene previsto ejecutar una serie de actuaciones que beneficiarán al denominado “sector oeste” comprendido entre Guía de Isora y Santiago del Teide.
La depuradora localizada en Guía de Isora (que emplea un sistema de ósmosis inversa para tratar 14.000 metros cúbicos al día en una primera fase, ampliable a 21.000 metros cúbicos/día en el futuro) abastecerá de agua potable a más de 70.000 habitantes de la zona costera de los municipios de Guía de Isora y Santiago del Teide, concretamente a las poblaciones de Los Gigantes, Playa de la Arena, El Varadero, Cueva del Polvo, Alcalá, Playa de San Juan y Piedra Hincada.
En cuanto a la desaladora de nuestro municipio (situada en una parcela de unos 18.000 metros cuadrados del Polígono Industrial), beneficiará a unos 60.000 habitantes de los municipios de Arico, Granadilla de Abona, San Miguel de Abona y Arona. Esta instalación también utiliza un sistema de ósmosis inversa para el tratamiento de 14.000 metros cúbicos al día, ampliable a 21.000 metros cúbicos en una segunda fase y hasta 42.000 metros cúbicos en el futuro.
Su construcción está valorada en 17,54 millones de euros y su puesta en marcha complementará a la depuradora de Adeje-Arona mediante la reutilización de aguas regeneradas para la agricultura, permitiendo así liberar recursos hídricos para la agricultura en la zona de medianías. En esta depuradora también se están ejecutando obras complementarias de conducciones por un importe de 7,8 millones de euros.
Juan Rodríguez Bello, concejal de Urbanismo, Obras y Servicios Municipales, calificó de “muy positivo” la puesta en marcha de esta infraestructura para Granadilla de Abona, ya que con ello se abastecerá la zona baja del municipio y, por tanto, se liberará el suministro en la parte alta que se podrá destinar esencialmente para la agricultura. También destacó la importancia de acometer la obra de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) ubicada en la parte baja de San Isidro, lo que permitirá un mejor bombeo de la misma y evitará los desbordamientos que se producen en la zona este de El Médano cada vez que llueve.
Posteriormente a esta visita a las desaladoras, el Alcalde y el concejal de Urbanismo, Obras y Servicios Municipales se reunieron con el consejero de Aguas del Cabildo de Tenerife en las dependencias municipales para analizar el proyecto de la desaladora que se está construyendo en nuestro municipio y lo que supondrá su puesta en funcionamiento para la población.
Jaime González Cejas destacó que este encuentro, el cual volverá a repetirse en próximas fechas, ha servido para valorar el estado de los trabajos que se estima estarán concluidos a lo largo del verano. El Alcalde indicó que con dicha desaladora se garantizará el 70% del suministro de agua del municipio, ya que se atenderá la demanda de la parte baja de San Isidro y de la zona costera. También señaló que “desde Granadilla hemos propuesto la posibilidad de que asimismo se impulse este suministro de agua hacia la parte alta sin que ello no repercuta en la subida del coste del servicio”.
Por su parte, Juan Rodríguez Bello aseguró que se ganará en calidad del producto y, además, se producirá una regulación de los precios del mercado del agua, que derivará en un ahorro para los bolsillos de todos los granadilleros. “Granadilla tendrá garantizado el servicio de este recurso hídrico, y ya no dependerá del suministro de galerías y demás en épocas de carestía y sequía”, indicó el concejal.